Pritzker 2020: un premio en femenino
El premio Pritzker de este año reconoce la inteligencia, el dinamismo y la excelente labor realizada por un estudio que se expresa en femenino, dando visibilidad al gran trabajo desarrollado por Grafton Architects. Esta oficina de arquitectura, capitaneada por dos grandísimas arquitectas, Yvonne Farrel y Shelley MacNamara, ha sido capaz de llevar su forma de concebir el arte de la concepción arquitectónica por todos los rincones del mundo.
Arquitectas en un mundo de arquitectos que hace décadas comenzaron a coger las riendas y mostrar todo su potencial en torno a la gestión y desarrollo de grandes proyectos. No fue hasta el año 2004, cuando la fallecida arquitecta iraquí-británica Zaha Hadid, obtuvo este reconocimiento. Unos galardones que iniciaron sus andanzas en el año 1979, y que han tardado casi 30 años en tener en cuenta el trabajo de una arquitecta y que dió paso en 2010 a Kazuyo Sejima en una línea continuista que ha llegado para quedarse.
Fotografía izquierda: proyecto Grafton Architects, Facultad de económicas Universidad Luigi Bocconi
Fotografía derecha: proyecto Grafton Architects, Bienal de Arquitectura de Venecia
El pasado martes 3 de Marzo amanecíamos con este genial anuncio, por parte de Martha Thorne, del nuevo premio Pritzker 2020 para estas excepcionales Arquitectas Irlandesas Yvonne y Shelley. La directora ejecutiva y el jurado de los premios destacan en un comunicado su capacidad de apoyarse en el sentido de la escala y la proporción, dando soluciones a entornos relativamente severos aportando la generación de espacios íntimos, además de “su integridad en el enfoque de sus edificios y su compromiso incesante con la excelencia en arquitectura, su actitud responsable hacia el medio ambiente, su capacidad de ser cosmopolitas al mismo tiempo que adoptan la singularidad de cada lugar en el que trabajan. Es por todos estos motivos, reciben el Premio Pritzker de Arquitectura 2020”.
Es el reconocimiento de mayor altura, tras recibir este mismo año el Premio RIBA, para un mediano estudio de más de 40 personas que toma su nombre del primer emplazamiento en el centro de Dublín donde creaban toda su obra, Gratton Street. Su vitrina está repleta de infinidad de galardones, siendo finalistas de los prestigios premios Mies Van der Rohe y obteniendo en el año 2015 el premio Jane Drew a la innovación, diversidad e inclusión en la Arquitectura.
Fotografía izquierda: proyecto Grafton Architects, Universidad UTEC en Lima
Fotografía derecha: proyecto Grafton Architects, Town house Kingston University UK Architecture
Durante sus más de cuatro décadas de labor profesional cabe destacar el proyecto de la Universidad de Ingeniería y Tecnología en Perú, un proyecto con una compleja estrategia estructural que busca a través de su geometría y formalidad integrarse en el entorno que lo rodea mediante una topografía creada como complemento al paisaje existente. Tal es la dimensión formal que rodea a la obra, que actualmente es el hito de bienvenida de Barranco en Lima.
Con un perfil polivalente, su carrera se desarrolla entre la docencia en su universidad de origen, la University College de Dublín, donde comenzaron a ejercer como profesoras un año después de conseguir la titulación de Arquitectas, la investigación y la divulgación, formando parte de la Bienal de Venecia en dos ocasiones y actuando como directoras en el año 2018, y una prolífica carrera con infinidad de proyectos construidos. Su obra ha desembarcado en todos los continentes, con la concepción de importantes edificios educativos en Londres, Milán, Toulouse o Dublín. Esta fuerte creencia y convicción en la docencia les lleva a comprender todos los procesos generados alrededor de estos espacios universitarios y ha ido forjando en ellas la capacidad de adaptar sus diseños a las necesidades reales. El hecho de su constante conexión con el mundo académico, ha posibilitado la intrínseca calidad espacial y funcional de todas sus propuestas.
Fotografía: Denise Scott Brown, la arquitecta más famosa del siglo XX
Merecido reconocimiento a una forma de pensar y acometer soluciones arquitectónicas, dando respuesta directa, tanto estética como formal, siempre de la mano de la generación de lugares donde apetece estar. Sus edificios han sido capaces de acoger la función con una excelsa naturalidad, ligados a una rotundidad en sus materiales que, a veces, puede parecer excesiva pero nunca resuelta de manera errónea.
Un premio Pritzker 2020 que pretende seguir la estela, en cierta manera, de la historia de la gran pionera Denise Scott Brown, primera mujer en recibir la Medalla de Oro del AIA en vida, y homenajea a todas las grandes profesionales de la Arquitectura, siendo anunciado en una fecha cercana a la celebración del, ya emblemático, 8 de Marzo, día internacional de la mujer.
Autor artículo: Carlos Pérez Armenteros, arquitecto y co-director de Verbo Estudio.